Todo lo que apaga nuestra vida espiritual
1 Juan 2:17 Y el mundo pasa, y su concupiscencia; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.
Jacobo 4:4 ...¿no sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que decide ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.
Es difícil describir en detalle lo que es el mundo; pero hay un principio básico: todo aquello que apague la vida espiritual es del mundo. El mundo elimina nuestro celo por la oración, nos roba el interés de leer la Palabra de Dios y nos impide testificar y proclamar nuestra fe delante de los hombres. Todo lo que nos impide acercarnos al Señor y confesar que creemos en Él es parte del mundo. El mundo es el ambiente que ahoga y seca a una persona; es cualquier cosa que disuade al hombre de amar y de anhelar al Señor con todo el corazón. Aquí vemos un principio muy importante: el mundo reprime nuestra inclinación espiritual. Debemos rechazar todo lo que apague nuestra vida espiritual.
Algunas personas dicen: "Esto no es pecaminoso. ¿Por qué dice que es mundano?" Muchas cosas parecen buenas, pero después de tocarlas una o dos veces, reprimen el fuego que tenemos por dentro, debilitan nuestra conciencia y secan paulatinamente el deseo de leer la Biblia. Aunque tengamos tiempo, no deseamos leer. Después de participar en tales cosas nos sentimos vacíos y no somos un testimonio ante los hombres. Quizás esos asuntos no sean pecado, pero apagan nuestra vida espiritual. Todo aquello que apague nuestra vida espiritual es del mundo, y debemos rechazarlo completamente. Neguemos la vida del alma (mente, emoción y voluntad) y sigamos al Señor, como discípulos.
W. Nee
Jesús es el Señor!
La iglesia en Armenia