AGUAS REFRESCANTES 23 de NOVIEMBRE
Del vaso que yo bebo, beberéis, y con el bautismo con que yo soy bautizado, seréis bautizados. Marcos 10:39.
Santiago y Juan deseaban sentarse al lado del Señor en la gloria. Sin embargo, sabiendo lo impropio de tal pedido, no se animaban a formularIo en forma directa, y le pidieron: "Querríamos que nos hagas lo que pidiéremos". Jesús no lo cumplió de inmediato sino que les pidió concretamente lo que querían. Su pedido tenía un doble significado. Por una parte estaba el deseo de estar cerca del Señor, y por el otro, la ambición de ejercer más autoridad que los demás.
Era muy natural que desearan estar cerca del Señor, y El no rechazó tal deseo. Sencillamente les aseguró que para ver ese deseo cumplido debían beber de la copa de su sufrimiento y ser bautizados con su bautismo de muerte y resurrección. Estos dos hermanos no sabían lo que estaban pidiendo, pero Jesús no se lo reprochó.
Tampoco los enjuició por sus otras ambiciones, pero les hizo saber que lo que querían no se obtenía con sólo pedir. La cercanía a Jesús en el futuro, requiere tan sólo una condición: vivir cerca de El ahora.
W. Nee
Jesus es el Señor!
La iglesia en Armenia