AGUAS REFRESCANTES 2 de OCTUBRE
Enmudecí, no abrí mi boca, porque tú lo hiciste. Salmo 39 :9.
Estas palabras expresan una adecuada actitud para aquellos que aman a Dios. Dado que El ordena todas las cosas para bien, este hecho suyo que me ha acontecido sólo puede ser para mi beneficio. Por lo tanto, me someteré a él sin protesta, sin preguntar siquiera por qué mi suerte difiere de la de los demás.
Si mi amor no está dirigido a Dios sino a algún objeto que estoy anhelando por lo que es, entonces y sólo entonces será diferido el bien que El quiere darme. La ausencia de una explicación poco importa. El camino para conocer a Dios es por el amor y no por el conocimiento. Cuando me acuerdo de lo que el Señor Jesús dijo acerca de los pájaros: "ni uno de ellos cae a tierra sin vuestro Padre", reconozco que debo aceptar en silencio lo que me viene de su mano, ya que su amor por mí lo ha planeado todo.
W. Nee
Jesus es el Señor!
La iglesia en Armenia