Unido2 por la Fe
Hola, bienvenido ¡¡¡bendiciones!!! al parecer aun no te encuentras registrado, te invitamos a que te unas a la comunidad..

Si quieres colaborar en este foro como uploader, Moderador o Supermoderador... manda un mensaje a los admnistradores del foro para mas detalles... bendiciones

Unido2 por la Fe
Hola, bienvenido ¡¡¡bendiciones!!! al parecer aun no te encuentras registrado, te invitamos a que te unas a la comunidad..

Si quieres colaborar en este foro como uploader, Moderador o Supermoderador... manda un mensaje a los admnistradores del foro para mas detalles... bendiciones

Unido2 por la Fe
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.


En busca de Emprendedores para el Señor UNETE!!
 
ÍndiceHomeÚltimas imágenesRegistrarseConectarse
Últimos temas
» ¡¡¡ Bin Soto 2da Produccion-Exclusiva Una RELIQUIA!!!
APARTADO PARA EL EVANGELIO DE LA VIDA (semana 23) I_icon_minitimeVie Nov 13, 2015 11:50 am por kikeandrad

» Una vida llena...
APARTADO PARA EL EVANGELIO DE LA VIDA (semana 23) I_icon_minitimeDom Mayo 03, 2015 6:40 pm por hgo1939

» David Brainerd
APARTADO PARA EL EVANGELIO DE LA VIDA (semana 23) I_icon_minitimeMiér Abr 29, 2015 11:08 pm por hgo1939

» La iglesia...
APARTADO PARA EL EVANGELIO DE LA VIDA (semana 23) I_icon_minitimeSáb Abr 25, 2015 5:37 pm por hgo1939

» El entretenimiento de la iglesia
APARTADO PARA EL EVANGELIO DE LA VIDA (semana 23) I_icon_minitimeJue Abr 23, 2015 3:53 pm por hgo1939

» Los himnos
APARTADO PARA EL EVANGELIO DE LA VIDA (semana 23) I_icon_minitimeMiér Abr 22, 2015 5:48 pm por hgo1939

» MANTENGAMOS UN ESTILO DE VIDA DE ADORACIÓN VIBRANTE
APARTADO PARA EL EVANGELIO DE LA VIDA (semana 23) I_icon_minitimeMar Abr 21, 2015 4:23 pm por hgo1939

» Las Escrituras
APARTADO PARA EL EVANGELIO DE LA VIDA (semana 23) I_icon_minitimeMar Abr 21, 2015 4:20 pm por hgo1939

» Viva conforme al propósito para el que fue creado
APARTADO PARA EL EVANGELIO DE LA VIDA (semana 23) I_icon_minitimeVie Abr 17, 2015 4:15 pm por hgo1939


Music
Pan de vida
>Alimenta alma con este nutritivo pan
Conectarse
Nombre de Usuario:
Contraseña:
Entrar automáticamente en cada visita: 
:: Recuperar mi contraseña
Contactame si urge

 

 APARTADO PARA EL EVANGELIO DE LA VIDA (semana 23)

Ir abajo 
AutorMensaje
hgo1939
Moderador
Moderador



Cantidad de envíos : 1135
Fecha de inscripción : 03/06/2009
Edad : 84
Localización : Armenia Colombia

APARTADO PARA EL EVANGELIO DE LA VIDA (semana 23) Empty
MensajeTema: APARTADO PARA EL EVANGELIO DE LA VIDA (semana 23)   APARTADO PARA EL EVANGELIO DE LA VIDA (semana 23) I_icon_minitimeDom Abr 17, 2011 10:22 pm

APARTADO PARA EL EVANGELIO DE LA VIDA (semana 23)
Los tres aspectos del ministerio
Lunes --- Leer con oración: Gn 1:26-28; Pr 16:18; Is 14:12-14; Ez 28:13-14, 17; Jn 1:12-13; Tit 1:15
“Porque la vida fue manifestada, y la hemos visto, y testificamos, y os anunciamos la vida eterna, la cual estaba con el Padre, y se nos manifestó” (1 Jn 1:2)
UNA COMISIÓN ESPECIAL
Como vimos anteriormente, hubo un primer mundo antes del que es citado en Génesis 1:3-26, que fue creado por Dios de manera muy bella (Job 38:4-7). Aquel mundo fue entregado a Lucero, el primer ministro de Dios, para que lo gobernara (Ez 28:14). Lucero estaba muy capacitado y fue equipado por Dios con muchas habilidades, esto es representado por las muchas piedras preciosas que lo adornaban (v. 13). En otras palabras, Dios lo equipó con muchos dones para ejercer la comisión que le había dado.
Al tener muchos dones, mucha sabiduría y hermosura, su ambición fue aumentando poco a poco (Is 14:13). Al principio, eso era algo espontaneo, debido a que estaba bien equipado y tenía mucha capacidad, su posición era cada vez más elevada. El problema es que de a poco, junto con el deseo vehemente de obtener éxito en la comisión que había recibido, la soberbia y el orgullo se manifestaron en su corazón (Ez 28:17; Pr 16:18). Se olvidó de que todos los dones que poseía, le fueron dados por Dios únicamente para que ejerciera la incumbencia que le confió.
Lucero no se sintió satisfecho con la responsabilidad que había recibido de Dios, sino que llegó al punto de querer ser “semejante al Altísimo” (Is 14:14). En esto él se excedió, y por ello Dios lo arrojó por tierra (Is 14:12; Ez 28:17). Desde entonces, él se convirtió en Satanás, que significa: adversario, el enemigo de Dios (Zac 3:1), y corrompió a todo el primer mundo. Por esa razón, Dios tuvo que juzgarlo con agua (Gn 1:2).
Después de hacer una obra de restauración que tomó seis días, Dios creó al hombre a Su imagen y semejanza. También lo bendijo y le encargó gobernar el mundo, sojuzgándolo y señoreando sobre todos los seres que estaban en la tierra, en el mar y en los cielos (vs. 26-28). Luego, Dios plantó un huerto en Edén y puso al hombre frente al árbol de la vida, el cual representa a Dios mismo (Jn 14:6; 15:1). Su deseo era que el hombre recibiera Su vida para que así pudiera señorear sobre la tierra y ejerciera Su autoridad sobre todas las criaturas. De esa manera, el reino de Dios estaría aquí. Por tanto, esa era la comisión dada al hombre.
No obstante, después que Adán comió del fruto del árbol de la ciencia del bien y del mal, la naturaleza pecaminosa entró en el hombre (Ro 7:17, 20). Desde entonces, es incapaz de cumplir la voluntad de Dios y es dominado por Su adversario, por eso el hombre necesitaba ser redimido.
Así que, Dios envió a Jesucristo que después de morir y resucitar, se hizo el Espíritu vivificante para entrar en el espíritu de todo aquel que cree en Él. Cuando el hombre recibe al Señor Jesús, no sólo es salvo de sus pecados, sino que también nace de nuevo, nace del Espíritu, y pasa a tener la vida eterna, la vida de Dios (Jn 1:12-13; 3:3, 6). Por medio del Espíritu, el hombre también llega a ser participante de la naturaleza divina (2 P 1:4), y así puede cooperar con Dios para cumplir Su plan original.
Agradecemos al Señor porque nos fue dada la comisión especial de predicar el evangelio de la vida, porque “la vida fue manifestada, y la hemos visto, y testificamos, y os anunciamos la vida eterna, la cual estaba con el Padre, y se nos manifestó” (1 Jn 1:2). Por un lado, predicamos el evangelio de la gracia, por medio del cual los pecadores obtienen la redención por la preciosa sangre de Cristo, es decir, la remisión de sus pecados (Ef 1:7); por otro, predicamos el evangelio del reino, presentando a los hijos de Dios la necesidad de crecer en la vida divina, llegar a ser vencedores y recibir el galardón de reinar juntamente con Cristo en el mundo venidero.
Punto Clave: Los dones son para ejercer la comisión de Dios.
Pregunta: A la luz de la experiencia de Lucero, ¿Cuál es el peligro de recibir dones, sabiduría y hermosura?



Martes --- Leer con oración: Mt 16:22-25; 1 Co 2:14-16; Ef 4:11-13
“Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame” (Mt 16:24)
NEGAR LA VIDA DEL ALMA FORMA PARTE DE NUESTRO PERFECCIONAMIENTO
Después de ser salvos, necesitamos permitir aún que Su vida crezca en nosotros continuamente, y así estaremos aptos para gobernar el mundo venidero. No obstante, existe un gran impedimento para que esto se concrete: con la caída, además de ser pecador, el hombre se volvió anímico, es decir, vive según su vida del alma, por eso sus pensamientos son contrarios a la voluntad de Dios.
El hombre natural, o anímico, no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente. Pero el hombre espiritual tiene la mente de Cristo (1 Co 2:14-16). Por eso, enfatizamos que aunque hayamos nacido de nuevo, la vida divina que está en nosotros necesita crecer hasta que seamos conformados a la imagen del Hijo de Dios (Ro 8:29).
A fin de obtener este crecimiento espiritual, después de ser salvos, Dios nos puso en la iglesia. La iglesia no es un edificio material ni la realización final de Dios, sino el lugar donde nosotros, los que recibimos la vida divina, podemos ser edificados con los santos como un cuerpo, el Cuerpo de Cristo.
Para que haya esta edificación, Cristo concedió a algunos para que fueran apóstoles, a otros profetas, a otros evangelistas y a otros pastores y maestros, los cuales nos ayudan a obtener el crecimiento espiritual y a ser perfeccionados en nuestros dones.
Mientras perfeccionan a los santos, estos hombres dones siempre deben recordarles Mateo 16, donde el Señor mostró que quien quiere seguirlo necesita negarse a sí mismo (v. 24). El Señor sabía, y estos hombres dones también saben que, si no aprendemos esta lección, tarde o temprano, aquellos que viven por su vida del alma manifestarán su insatisfacción y orgullo, como el ejemplo de lo que sucedió con Lucero.
Por eso nosotros, en la vida de la iglesia, necesitamos aprender a negar la vida del alma, porque hoy este es el punto principal que impide que el Cuerpo sea edificado y que la voluntad de Dios sea cumplida. ¡Damos gracias al Señor por habernos mostrado esto y por insistir con nosotros en este asunto! Quien se niega a sí mismo, crece en la vida divina, coopera con el Señor en Su edificación hoy y reinará con Él en el mundo venidero.
Punto Clave: Negarse a sí mismo para reinar con Él en el mundo venidero.
Pregunta: ¿Cuál es la diferencia entre el hombre natural y el hombre espiritual?



Miércoles --- Leer con oración: Mal 4:4; Hch 16:6-7; 21:4,11-14,23-24, 27-32; 28:30; 2 Co 12:4
“Así, pues, téngannos los hombres por servidores de Cristo, y administradores de los misterios de Dios” (1 Co 4:1)
LA ECONOMÍA DE DIOS EN LA BIBLIA
Sabemos que cada país tiene su plan de gobierno, el cual necesita de ministros para ejecutarlo. El reino de Dios también es así. Tiene una economía, un plan, que debe ser ejecutado. A fin de llevar a cabo Su economía, Dios necesita de ecónomos, es decir, ministros, que revelen y ministren Sus inescrutables riquezas a Sus hijos (1 Co 4:1).
En el Antiguo Testamento, la economía de Dios fue revelada por medio de Moisés; en el Nuevo Testamento, Dios usó los escritos de Pablo para hacerla conocida a cada uno de nosotros (Ef 3:3-10). Pablo obtuvo esas revelaciones cuando servía en la iglesia en Damasco. En aquel periodo, Pablo viajó a las regiones de Arabia (Gá 1:17) y allí, según lo que él mismo describe, recibió una visión, y oyó palabras inefables (2 Co 12:4). Tales palabras tuvieron un gran impacto en su vida y servicio. Basado en ellas, Pablo predicó el evangelio, levantó iglesias e intentó edificarlas.
En sus dos primeros viajes, Pablo siguió al Espíritu fielmente (Hch 16:6-7), pero no sabemos por qué en su tercer viaje ocurrió algo diferente: tuvo dificultades para oír lo que el Espíritu le decía por medio de muchos miembros del Cuerpo, e insistió en lo que se propuso hacer (21:4, 11-14).
Al final del tercer viaje, Pablo recibió una sugerencia de Jacobo y terminó haciendo el voto del nazareato (vs. 23-24). Este habría sido el final del ministerio que el Señor le había comisionado, de edificar las iglesias. Por eso Dios permitió que los judíos se levantaran en contra de él para matarlo (vs. 27-28). Aunque en aquel momento no estaba cumpliendo fielmente su responsabilidad en el ministerio, Dios tuvo misericordia de él y lo salvó. En medio del tal alboroto, donde los judíos querían matarlo, un tribuno romano le salvó la vida (vs. 30-32).
Pablo fue apresado y en Roma, le fue concedido permanecer en una prisión domiciliaria (28:30). Allí escribió las epístolas sobre la economía neotestamentaria de Dios –Efesios, Colosenses, Filipenses y Filemón–. Son epístolas relacionadas con la economía neotestamentaria de Dios, que presentan el contenido de la fe: el dispensar del Dios Triuno hacia dentro del hombre tripartito con miras a la edificación del Cuerpo de Cristo. Hasta hoy somos ayudados por la revelación contenida en estas epístolas.
Punto Clave: Dios necesita de ministros para ejecutar Su plan.
Pregunta: ¿Por qué Pablo fue preservado por el Señor después de su tercer viaje ministerial?



Jueves --- Leer con oración: Jn 1:1-3,14,18; 14:2-3,16-18, 26; 1 Co 15:45b
“Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre: el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros” (Jn 14:16-17)
LA ECONOMÍA DE DIOS REVELADA POR JUAN
Ayer vimos que Dios reveló Su economía al apóstol Pablo e hizo de él un ministro, un ecónomo, a fin de que nos transmitiera las riquezas del Dios Triuno para que cumplamos Su plan. Sin embargo, esta revelación no le fue dada exclusivamente a Pablo. En los tres años y medio en que el Señor Jesús estuvo con Sus discípulos, ya les había hablado sobre Su economía. Sin embargo, los discípulos no le dieron importancia a eso o tal vez no entendieron lo que Él les dijo.
En el año 70, el príncipe Romano Tito destruyó la ciudad de Jerusalén y su templo (Mt 24:2). Los líderes como Pablo y Pedro fueron martirizados. Juan, en aquella época, era sólo un seguidor de Jesús que acompañaba al apóstol Pedro adónde iba (Hch 3:1). Con relación al ministerio de la Palabra, él tampoco era prominente como Pedro. Posiblemente, puesto que no ejercía ningún liderazgo directo sobre los demás, Juan no fue muerto como sucedió con Pedro y Pablo, sino que fue exiliado durante veinte años en la isla de Patmos.
Durante esos veinte años de prisión, Juan maduró espiritualmente. Ciertamente aprendió a vivir más en el espíritu (Ap 1:10). Por estar más sensible al Espíritu en aquellos años, Juan se acordó de las revelaciones que el Señor Jesús había hecho en el tiempo en que estuvo con ellos, pero en ese entonces ellos no entendieron (Jn 14:26). Hoy, de la misma manera, si permanecemos en el espíritu, donde mora el Espíritu de Dios, Él nos enseñará todas las cosas y nos hará recordar todo lo que el Señor Jesús dijo. ¡Aleluya!
Juan empieza su evangelio de una manera maravillosa: “En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Este era en el principio con Dios. Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho” (Jn 1:1-3). El Señor Jesús era el Verbo, es decir, la Palabra de Dios, que no sólo estaba con Dios, sino que era Dios mismo.
Estos versículos muestran la relación del Hijo con el Padre. Si un hombre se queda callado, nadie lo conocerá, será una persona misteriosa. Pero, si comienza a hablar, lo conoceremos. Cuando la palabra de alguien sale, ésta revela cómo es la persona.
Juan también escribió que “aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad” (v. 14). El Verbo que fue hecho carne es el Señor Jesús. A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, Él le dio a conocer (v. 18). Cuando el Hijo vino, el Verbo vino, y Dios fue revelado. Por tanto, quien ve al Señor Jesús, ve al Padre, pues el Hijo revela al Padre (Jn 14:8-9).
El Señor Jesús vivió en la tierra cerca de treinta y tres años y medio. Después fue muerto y en resurrección llegó a ser el Espíritu vivificante (1 Co 15:45b). Este Espíritu es el Espíritu de realidad, que puede estar para siempre con nosotros (Jn 14:16-18). Esta es la economía neotestamentaria de Dios.
En los escritos de Juan podemos ver claramente el proceso por el cual el Señor Jesús pasó para entrar en nosotros y darnos vida. Él es Dios mismo que se encarnó, pero en la forma humana, Dios no podía estar para siempre con el hombre, por eso fue necesario que Él se vaya (muera) y vuelva (resucite) para que el otro Consolador (el Espíritu de realidad) pudiera estar para siempre con nosotros y así nos dé vida. ¡Aleluya!
Punto Clave: ¡El Señor es el Espíritu que vivifica!
Pregunta: ¿Cuál es el énfasis dado por Juan en sus escritos acerca de la economía de Dios?



Viernes --- Leer con oración: Lc 9:23; 1 Co 9:23; 12:1-6; 14:3; 16:2, 15
“Nadie puede llamar a Jesús Señor, sino por el Espíritu Santo (1 Co 12:3b). Pues si anuncio el evangelio, no tengo por quégloriarme; porque me es impuesta necesidad; y ¡ay de mí si no anunciare el evangelio” (1 Co 9:16)
INVOCAR AL SEÑOR Y PREDICAR EL EVANGELIO
El Señor quiere entregar el mundo venidero para que lo gobernemos juntamente con Él, por eso la vida de Dios necesita crecer en nosotros. Durante el tiempo en que estamos en la vida de la iglesia, necesitamos ser perfeccionados por el Señor, esto implica negar nuestra vida del alma y hacer la voluntad de Dios, según Su plan, Su economía.
El Señor quiere perfeccionarnos, a fin de que transformemos nuestros dones en ministerios, y estos ministerios por su parte, se transformen en las operaciones de Dios (1 Co 12:4-6). El ministerio tiene tres aspectos: la Palabra (1 Co 14:3), los servicios (16:15) y las ofrendas (16:2). ¿Por qué estamos hablando nuevamente de estos tres aspectos? Porque no sólo necesitamos darle atención a esto sino, que necesitamos también ser perfeccionados para llegar a ser verdaderos ministros de la Palabra, de los servicios y de las ofrendas.
Primera Corintios 12:1-2 dice que antes de ser salvos, adorábamos a los ídolos mudos, y como resultado de esto nos volvimos mudos. Pero, después de creer en el Señor, comenzamos a invocar Su nombre y a vivir por el Espíritu de Dios (v. 3). Mientras más invocamos el nombre del Señor Jesús, más fuertes nos volvemos, más alegres y dispuestos a predicar el evangelio: “Y esto hago por causa del evangelio, para hacerme copartícipe de él” (1 Co 9:23).
Aquellos que ya han invocado el nombre del Señor y hoy lo han dejado de hacer, cayeron en la mente y formaron en ella grandes fortalezas. Pero nosotros, por el contrario, necesitamos ser modelos para los santos, invocando siempre el nombre del Señor. Asimismo, cada vez que nuestro ser natural se manifieste, debemos ser los primeros en tomar la cruz para hacerlo morir, es decir, hacer morir nuestra vida del alma, con sus razones. Jesús fue crucificado una sola vez, pero para negar la vida del alma necesitamos tomar la cruz durante todo nuestro vivir terrenal.
Cuando un vaso está lleno de agua, es necesario vaciarlo para poner más agua en él. Así también, para que la vida de Dios nos sea añadida, necesitamos eliminar nuestra vida del alma, nuestro ser natural. Este proceso no ocurre por una sola vez, sino cada día (Lc 9:23). Por eso debemos vaciarnos todos los días, para que poco a poco, continuamente, la vida divina nos sea añadida. ¡Aleluya!
Punto Clave: ¡Vaciarnos diariamente para llenarnos de la vida divina!
Pregunta: ¿Cuáles son las consecuencias de dejar de invocar al Señor?



Sábado --- Leer con oración: Mr 12:42-43; 1 Co 16:15; 2 Co 8:2-5; Ef 4:11-14
“Por lo cual, teniendo nosotros este ministerio según la misericordia que hemos recibido, no desmayamos. Antes bien renunciamos a lo oculto y vergonzoso, no andando con astucia, ni adulterando la palabra de Dios, sino por la manifestación de la verdad recomendándonos a toda conciencia humana delante de Dios” (2 Co 4:1-2)
LOS TRES ASPECTOS DEL MINISTERIO
¡Gracias al Señor! Porque Él le concedió a Su Cuerpo varios ministros de la Palabra con el fin de perfeccionar a más hermanos para que desempeñen este aspecto del ministerio. De entre los ministros de la Palabra están los apóstoles, los profetas, los evangelistas que fueron perfeccionados para suplir la necesidad de las iglesias, en un sentido más amplio, e incluso regional. En el caso de los pastores y maestros, ellos son hermanos constituidos de la Palabra que desempeñan principalmente su función cuidando de la iglesia en una ciudad (Ef 4:11-12).
Mientras más hermanos sean perfeccionados, más rápido podremos cooperar con el Señor en llevar el evangelio de la vida a las personas. No obstante, si no nos disponemos a ser perfeccionados y a negarnos a nosotros mismos, ¿cómo predicaremos el evangelio de la vida? Por eso nuestra responsabilidad es muy grande (2 Co 4:1). El Señor nos encomendó ayudar a más hermanos a crecer en la vida divina, para que no sean más niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error (cfr. Ef 4:14). Necesitamos avanzar, seguir creciendo positivamente en todo en Aquel que es la cabeza, Cristo. ¡Aleluya!
Además del ministerio de la Palabra, necesitamos ser perfeccionados en el ministerio de los servicios (1 Co 16:15). Este ministerio es muy amplio; no seremos perfeccionados en él sólo si no queremos serlo. Podemos ser útiles a la iglesia y a los santos cooperando con la limpieza del local de reuniones, en la recepción de los hermanos, en el hospedaje etc. Podemos también reservar algún tiempo para servir en el lugar de oración, orando y predicando la palabra de Dios a los que estén allí. Hay hermanos que no están dispuestos, porque sólo se preocupan por sus propios intereses o por sus bienes materiales; los que actúan así nunca tienen tiempo para ningún servicio de la iglesia. No obstante, si estamos dispuestos y deseamos ser perfeccionados, rápidamente podremos ser incluidos en el ministerio de los servicios.
El tercer aspecto del ministerio es el de las ofrendas de riquezas materiales. Este ministerio no sólo es para los que tienen mucho dinero (1 Co 16:2; 2 Co 8:2-5; Mr 12:42-43). Todos pueden ser ministros de ofrendas. Además del diezmo, podemos ofrendar para las muchas otras necesidades de la iglesia y poco a poco, nos convertiremos en ministros de ofrendas de riquezas materiales.
Algunos hermanos, por estar muy ocupados con su trabajo secular, no tienen tiempo para participar de la obra del Señor. Pero, por Su gran misericordia, Él nos ha iluminado de que nuestra casa puede convertirse en un lugar de oración, donde podemos contactar a nuestros vecinos, parientes y amigos para orar con ellos y predicarles el evangelio. De esta manera, todos pueden participar en la propagación del evangelio del reino. Actualmente, muchos hermanos ya están practicando esta carga y el Señor los ha bendecido ricamente.
¡Alabamos al Señor porque ya recibimos la vida de Dios! Ahora, Él desea que crezcamos, que seamos perfeccionados y desarrollemos nuestros dones hasta que lleguen a ser ministerios, a fin de que cooperemos con Su obra hoy y en el reino venidero, gobernemos sobre las naciones juntamente con Cristo..
Punto Clave: Palabra, servicio y riquezas materiales.
Pregunta: ¿Cuál era la excusa que teníamos para no participar de la obra del Señor?



Domingo --- Leer con oración: Hch 16:15, 34; Gá 3:2
“Será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin” (Mt 24:14)
ALCANZAR A TODOS CON EL EVANGELIO
El Señor aún no ha vuelto porque está esperando que prediquemos el evangelio del reino en todo el mundo (Mt 24:14). Por eso, además de crecer en vida hasta alcanzar la estatura de la plenitud de Cristo, también necesitamos ser perfeccionados para la obra del ministerio en sus tres aspectos principales: de la Palabra, de los servicios y de las ofrendas de riquezas materiales.
Para que el evangelio del reino sea predicado en todo el mundo, necesitamos atender el llamado del Señor. Si logramos ver cuán grande es la necesidad de las personas, vamos a querer abrir un Bookafe* en todos los distritos y barrios de nuestra ciudad, ya sea en los ricos o en los más populares, a fin de alcanzar, con el evangelio, al mayor número posible de personas.
Sin embargo, si no logramos abrir un Bookafe, podemos abrir lugares de oración en locales comerciales, en nuestro trabajo, o en cualquier lugar donde las personas temerosas de Dios puedan buscar un ambiente de oración, para orar por sus necesidades. Hoy, todos podemos participar, abriendo principalmente nuestra casa para hacer de ella un lugar de oración, o una casa de reunión de la iglesia, así como la casa de Lidia y la casa del carcelero en Filipos, éstas fueron abiertas después que sus dueños recibieron la salvación de Dios (Hch 16:15, 34).
En nuestra casa tenemos un ambiente acogedor para predicar el evangelio a las personas y orar con ellas. Independientemente del tamaño de la sala, todos podemos abrir nuestra casa. Cada uno puede invitar a sus vecinos y decirles: “¿Necesitan oración? Aquí en mi casa hay un lugar de oración, podemos orar por usted hoy”. Después de orar, además podemos ofrecerles un cafecito, para estrechar nuestra comunión al término de la reunión, estableciendo así un vínculo orgánico de vida; podemos leer con ellos una porción de la palabra de Dios, o del Alimento Diario, o incluso de otros libros espirituales que les ayuden a ser conducidos a la fe. Por la predicación, o el oír con fe, las personas recibirán al Espíritu (Gá 3:2). ¡Practiquemos esto y ciertamente el Señor nos bendecirá!
Punto Clave: Predicar el evangelio del reino en todo lugar.
Pregunta: ¿Qué está haciendo usted para que el evangelio del reino sea predicado?
*Lugar o ambiente donde además de las oraciones, tenemos libros espirituales –“book”– que conducen a las personas a la “fe”. Para que haya un ambiente más acogedor, en este lugar se pueden servir cafés, dulces, emparedados, jugos, etc. La principal función de este espacio es orar con y por las personas a fin de suplirles con vida por medio de la palabra de Dios.
Dong Yu Lang
Derechos reservados a: editora “Arvore da Vida”
¡Jesús es el Señor! - Jesus is Lord - Jesus ist der Herr - Yeshua adonai - Gesù è il Signore - Jésus est Seigneur - Ιησους ειναι ο Λορδος - Иисус – Господь - يسوع هو الرب - 耶稣是主 - 主イエスは - Jesus é o Senhor - Jesus är lorden Jesus är Herre
Literatura disponible en:
corpocri@yahoo.com
laiglesiaenarmenia@yahoo.com


Volver arriba Ir abajo
 
APARTADO PARA EL EVANGELIO DE LA VIDA (semana 23)
Volver arriba 
Página 1 de 1.

Permisos de este foro:No puedes responder a temas en este foro.
Unido2 por la Fe :: Vida Cristiana-Area Espiritual :: Reflexiones, Poemas y Devocionales-
Cambiar a: