Invocar al Señor para ser salvo (2)
1 Corintios 1:2 A la iglesia de Dios que está en Corinto, a los santificados en Cristo Jesús, los santos llamados, con todos los que en cualquier lugar invocan el nombre de nuestro Señor Jesucristo, Señor de ellos y nuestro.
Romanos 10:12 Porque no hay distinción entre judío y griego, pues el mismo Señor es Señor de todos y es rico para con todos los que le invocan.
(Parte 2 de 4)
En el Nuevo Testamento, invocar el nombre del Señor fue mencionado primero por Pedro en Hechos 2:21, el día de Pentecostés, como cumplimiento de la profecía de Joel. Este cumplimiento tiene que ver con el hecho de que Dios derramase económicamente el Espíritu todo-inclusivo sobre Sus escogidos para que participasen de Su jubileo neotestamentario. La profecía de Joel y su cumplimiento con relación al jubileo neotestamentario de Dios tienen dos aspectos: por el lado de Dios, Él vertió Su Espíritu en la ascensión del Cristo resucitado; por nuestro lado, invocamos el nombre del Señor ascendido, quien lo ha efectuado, logrado y obtenido todo.
Invocar el nombre del Señor es de vital importancia para que los que creemos en Cristo participemos del Cristo que lo es todo y lo disfrutemos a Él y lo que Él ha efectuado, logrado y obtenido. Es una práctica importante en la economía neotestamentaria de Dios que nos permite disfrutar al Dios Triuno procesado, y ser plenamente salvos (Ro. 10:10-13). Los primeros creyentes practicaban esto en todas partes y para los incrédulos, especialmente para los perseguidores, llegó a ser muy característico de los creyentes de Cristo (Hch. 9:14-21). Cuando Esteban sufrió persecución, él invocó al Señor (7:59), lo cual seguramente impresionó a Saulo, uno de sus perseguidores (7:58-60). Más adelante, el incrédulo Saulo, perseguía a los que invocaban este nombre (9:14, 21) identificándolos por esta invocación. Inmediatamente después de que Saulo fue capturado por el Señor, Ananías, quien condujo a Pablo a la comunión del Cuerpo de Cristo, lo mandó a que se bautizara invocando el nombre del Señor para mostrar que él también había llegado a ser uno que invocaba. C2013 Living Stream Ministry
¡Jesús es el Señor!