NUESTRA ACTITUD PARA CON LAS VERDADES

NUESTRA ACTITUD PARA CON LAS VERDADES
EXTRAER VIDA DE LAS VERDADES (2 Co 3:5-6)

Semana 16
LUNES
Lectura Bíblica: (Hch 9:15; Jn 7:38-39; Ro 8:11; Gá 1:17; 2 Co 12:1-4)
Leer con oración: “Por revelación me fue declarado el misterio, como antes lo he escrito brevemente, leyendo lo cual podéis entender cuál sea mi conocimiento en el misterio de Cristo, misterio que en otras generaciones no se dio a conocer a los hijos de los hombres, como ahora es revelado a sus santos apóstoles y profetas por el Espíritu” (Ef 3:3-5).
LAS DOS LINEAS MINISTERIALES QUE REVELAN
LAS VERDADES NEOTESTAMENTARIAS

Hemos visto que, en el Nuevo Testamento, las verdades provienen dos líneas ministeriales, una de las cuales es representada por el apóstol Pablo, y la otra, por los 12 apóstoles.
La primera línea ministerial esta basada en las visiones y revelaciones que Pablo recibió de parte de Dios cuando estuvo en el tercer cielo, las cuales él registro en forma de cartas. Cuando leemos sus epístolas, podemos ver la comisión de Dios confiada al apóstol: transmitir las verdades al respecto de la economía neotestamentaria (Ef 3:1-4; Col 1:25). La otra línea es las de los 12 apóstoles, la que llamamos la línea de vida, pues está basada en las experiencias que ellos tuvieron con el Señor Jesús, cuando Él estuvo en la tierra. Necesitamos evaluar nuestra actitud con relación a las verdades presentadas por esas dos líneas ministeriales para ver si sólo las estudiamos y analizamos, o si buscamos extraer vida de ellas.
En cuanto a Pablo, sabemos que él fue llamado para ser un apóstol entre los gentiles (Hch 9:15). Pablo fue instruido a los pies de Gamaliel y se convirtió en un fariseo ortodoxo, irreprensible en cuanto a la ley, lo que lo destacó entre sus contemporáneos (Gá 1:14-15). Por tanto, creemos que él estaba muy claro en relación a las verdades del Antiguo Testamento, pero aun no conocía la economía neotestamentaria de Dios. Por eso necesitaba ser preparado para ejercer su ministerio. Tras su conversión, camino a Damasco, Pablo estuvo en las regiones de Arabia, donde probablemente fue arrebatado, en el espíritu, al tercer cielo, y recibió la revelación de toda la economía de Dios en el Nuevo Testamento, conforme a lo que él mismo relata en Segunda de Corintios 12:1-4.
Esta semana veremos que, para extraer vida de las verdades registradas en el Nuevo Testamento, tanto las registradas por Pablo, como las presentadas por los 12 apóstoles, representados principalmente por Pedro y Juan, necesitamos estar en nuestro espíritu, donde mora el espíritu (Jn 7:38-39; Ro 8:11). En cuanto a la verdad sobre el Espíritu, mañana usaremos la figura del aceite de la unción para explicarla.
Punto clave: Necesitamos evaluar nuestra actitud con relación a las verdades neotestamentarias.
Mi punto clave:
Pregunta: ¿En que se basó el ministerio de Pablo y el de los 12 apóstoles?
¡Jesús es el Señor!