VARIAS TRADUCCIONES DE LA PALABRA NOUS
La palabra griega nous se traduce mente, y se usa veinticuatro veces en el Nuevo Testamento. Enumeraremos las citas donde aparece. Espero que los lectores recuerden las similitudes entre estos versículos:
Lucas 24:45: “Entonces les abrió el entendimiento, para que comprendiesen las Escrituras” Romanos 1:28: “Y como ellos no aprobaron tener en su pleno conocimiento a Dios, Dios los entregó a una mente reprobada, para hacer cosas que no convienen”.
Romanos 7:23: “Pero veo otra ley en mis miembros, que está en guerra contra la ley de mi mente, y que me lleva cautivo a la ley del pecado que está en mis miembros”.
Romanos 11:34: “Porque ¿quién conoció la mente del Señor?
Romanos 14:5: “Cada uno esté plenamente convencido en su propia mente”.
Primera Epístola a los Corintios 1:10: “Que estéis perfectamente unidos en un mismo sentir y en un mismo parecer”. La palabra nous se traduce sentir.
Primera Epístola a los Corintios 2:16: “Porque ¿quién conoció la mente del Señor? ¿quién le instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo”.
Efesios 4:17: “Esto, pues, digo y testifico en el Señor: que ya no andéis como los gentiles, que todavía andan en la vanidad de su mente”.
Colosenses 2:18: “Que nadie con humildad autoimpuesta y culto a los ángeles, os defraude juzgándoos indignos de vuestro premio, hablando constantemente de lo que ha visto, vanamente hinchado por la mente puesta en la carne”.
Segunda Epístola a los Tesalonicenses 2:2: “Que no os dejéis mover fácilmente en vuestro modo de pensar”. Modo de pensar es la traducción de nous.
Apocalipsis 17:9: “Esto para la mente que tiene sabiduría”.
Romanos 7:25: “Así que, yo mismo con la mente sirvo a la ley de Dios”.
Romanos 12:2: “Transformaos por medio de la renovación de vuestra mente”.
Primera Epístola a los Corintios 14:14-15: “Pero mi mente queda sin fruto. ¿Qué pues? Oraré con el espíritu, pero oraré también con la mente; cantaré con el espíritu, pero cantaré también con la mente”.
Primera Epístola a los Corintios 14:19: “Pero en la iglesia prefiero hablar cinco palabras con mi mente, para instruir también a otros”.
Efesios 4:23: “Y os renovéis en el espíritu de vuestra mente”.
Filipenses 4:7: “Y la paz de Dios ... guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos”. Nous se traduce aquí pensamientos.
Primera Epístola a Timoteo 6:5: “Constantes altercados entre hombres corruptos de entendimiento”. Nous es traducida entendimiento.
Segunda Epístola a Timoteo 3:8: “Hombres corruptos de entendimiento”.
Tito 1:15: “Su mente y su conciencia están contaminadas”.
Apocalipsis 13:18: “El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia”.
LA RELACION ENTRE LA MENTE Y EL CREYENTE
¿Cómo se relaciona la mente con la vida, la obra, el servicio del creyente ante Dios? Aquellos que creen en el Señor tienen un espíritu y un corazón. Esto es un hecho innegable. No importa cuán débil o fuerte sea un creyente, él nace de Dios y recibe un espíritu nuevo y un corazón nuevo. Por eso puede amar al prójimo, servir a Dios y hacer todo de corazón. Sin embargo, a pesar que su corazón es nuevo, la parte del corazón que corresponde a la mente no ha sido renovada. De acuerdo con los razonamientos humanos, se creería que debido a que el corazón es renovado, la mente y la conciencia, que son parte del corazón, también debieron ser renovadas. Pero ése no es el caso. Por ejemplo, la conciencia, que es parte del corazón, fue renovada cuando fuimos salvos, pero después de ser salvos, no permanece en esta condición. Cuando uno compra un vestido, es nuevo los primeros días, pero no permanece nuevo toda la vida. Uno debe cuidarlo mucho para mantenerlo como nuevo. Cuando fuimos salvos, nuestra mente fue renovada, lo cual no significa necesariamente que ha de permanecer nueva por mucho tiempo. Esta es la experiencia de muchos creyentes. Cuando un hombre cree en el Señor, es salvo y obtiene una conciencia nueva, cuya función es restaurada, de tal manera que él ahora aborrece el pecado y se entristece cuando peca. Pero, ¿puede permanecer nueva la conciencia del hombre? No, no puede. Si una persona peca, o si empieza a tolerar los pecados, y no escucha a su conciencia, después de cometer repetidamente un pecado, la conciencia no lo reprenderá; pues ha perdido su función. Así como la conciencia puede perder su función y dejar de ser nueva, le puede ocurrir lo mismo a la mente. Así que quisiera hablar de la mente, porque ésta se relaciona vitalmente con la posición y la vida del creyente. Continua…
Tomado de: La renovación de la mente W. Nee