Aguas refrescantes 5 de diciembre
“Hizo Jacob voto, diciendo: Si fuere Dios conmigo, y me guardare en este viaje en que voy… Jehová será mi Dios”. Génesis 28:20, 21.
¿No es verdad que hiciste un voto cuando te convertiste? Aunque quizás hayas realizado un acto interesado igual que Jacob, tu corazón estaba bien. Al disponer te tomar el camino del Señor tu corazón estaba en la actitud correcta.
¿Pero has sido también como lo fue Jacob después? Al día siguiente echó tras sus espaldas su promesa. Viajó hacia el oriente y, lejos de confiar en Dios, comenzó de inmediato a maniobrar con su sagacidad para lograr el éxito. No puso su confianza en Aquél a quien le había pedido protección, vestido y alimento, sino que se apoyó en sí mismo. ¡Qué bien nos representa a nosotros! Miró a Dios pero confió en su propia inteligencia. Sin embargo Dios preparó a Labán, un hombre mucho más inteligente que Jacob. Paso a paso, por medio de la adversidad fue llevado hasta volver precisamente a su voto inicial, hasta que finalmente sólo podía confesar que era indigno de la más pequeña de las mercedes de Dios.
W. Nee
Jesus es el Señor!
La iglesia en Armenia